Las mujeres emberas que participaron en los violentos disturbios del miércoles en el centro de Bogotá pusieron en riesgo la integridad de los niños que llevaron a los desmanes, declaró el director de Protección y Servicios Especiales de la Policía, coronel John Alzate.

Explicó que están evaluando los videos de las cámaras de seguridad y de redes sociales en las que aparecen varia indígenas lanzando piedras, mientras cargan a sus bebes a sus espaldas.

Con base  lo anterior, el oficial declaró a Caracol Radio que las autoridades iniciaron el proceso para restablecer los derechos de los menores de edad que fueron vulnerados.

En estas situaciones, los niños y niñas víctimas quedarían a cargo del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) o del Defensor de Familia, anotó.

“En coordinación con la Fiscalía General de la Nación se están evaluando dichas imágenes para determinar la posible ocurrencia del delito de uso ilícito de menores para la comisión de delitos, teniendo en cuenta que se observan a varios niños y niñas en esa situación”, añadió el oficial.

“Los derechos de los niños, niñas y adolescentes gozan de especial protección constitucional y prevalecen sobre los demás; por tanto, es responsabilidad de las instituciones y de los ciudadanos velar por la protección y garantía de los mismos”, anotó.

También pidió la colaboración de la ciudadanía para que entregue información a la Línea Segura de la Sijin de Bogotá, 3057681131, para que apoyen en la identificación y ubicación de las mujeres indígenas que podrían perder parcialmente la custodia de sus hijos menores de edad.

Al mismo tiempo se exponen a un proceso penal por violencia contra servidor público.

La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, denunció a través de sus redes sociales que varios “líderes” emberas explotan en mendicidad a mujeres y niños, mientras se gastan las ayudas que les damos en licor y ejercen violencia contra su propia comunidad, ciudadanos y servidores públicos”.

Informó además que pese a que la administración distrital les ofreció varios albergues, “el único aceptado por políticos indígenas Bakata fue La Rioja a sabiendas que no era el más adecuado. Lo usan como presión”, escribió.

También dijo que el Distrito ha aportado $9.000 millones en albergues, atención humanitaria, de salud, educación y alimentación de la población embera durante los últimos dos años.

“Es responsabilidad del gobierno nacional evitar el desplazamiento y garantizar el retorno. Agradecemos al Presidente que al fin se asuma”, anotó.

Los indígenas desplazados por el conflicto, que reclaman atención y una mejora de sus condiciones de vida, acabó este miércoles con fuertes disturbios con la Policía y 24 heridos, 11 de ellos policías.